Lindsay Adler
Fotógrafa de moda y retratista
Lindsay Adler
Lindsay Adler es una fotógrafa de moda y retratista que reside en Nueva York. Su trabajo ha aparecido en numerosas publicaciones internacionales de moda y fotografía, como Elle, Harper’s Bazaar, Marie Claire y Numéro. Un estilo elegante, limpio y gráfico se ha convertido en el sello distintivo de su obra, que solicitan clientes de todo el mundo.
Proyecto destacado
"Todo el mundo tiene alguna historia sobre marcas de discos que dan problemas, pero SanDisk Professional no me ha dado ninguno."
"Cuando trabajo fuera del estudio, sobre todo en sesiones de moda, el tiempo es oro", afirma la reconocida fotógrafa de moda y retratista Lindsay Adler. "A veces quieres hacer fotos hasta el último momento posible porque has alquilado el lugar por a saber cuántos miles de dólares. En cuanto se te acaba el tiempo, tienes que irte, o te cobrarán bastante por el tiempo extra. Justo en el último segundo grito "¡Hemos acabado!" para que los becarios o asistentes recojan todo. A veces recogen tan rápido que se olvidan de que los discos están conectados, y se les caen al suelo con todas las fotos del día. Se quedan paralizados, seguramente piensan que me voy a enfadar, pero siempre digo "Conéctalo, échale un vistazo y asegúrate de que todo esté bien". Desde que uso discos SanDisk Professional, siempre está bien. Siempre. Solo compro equipo que sea duradero y fiable por este motivo."
Adler empezó haciendo fotos a los protagonistas habituales a los 15 años: amigos y familia, bodas, recién nacidos y graduaciones de instituto, entre otros proyectos. Pronto empezó a preguntar a todos los fotógrafos profesionales de la zona a qué universidad debería ir y qué debería estudiar.
Adler recuerda que "Todos me decían que no estudiase fotografía, que estudiase empresariales. Cualquiera puede hacer buenas fotos, pero hay que tener experiencia y conocimientos para llevar un negocio con éxito"."
Hizo caso de la mitad de lo que le aconsejaron y se matriculó en la Universidad de Syracuse, donde estudió Fotografía y Empresariales. Sin embargo, no se apuntó a ninguna clase de fotografía de moda hasta casi terminar la universidad. Eso cambiaría su vida. Sabía que había descubierto su pasión. No le bastaba con dedicarse a las bellas artes. Adler ansiaba el reto extra que suponía tomar la visión de otra persona e impregnarla con su propio talento y creatividad para hacer algo aún mejor.
Después de estudiar fotografía de moda en Londres, Adler volvió a su hogar en el norte del estado de Nueva York para trabajar en un estudio de retratos, a la vez que se esforzaba por dedicarse a la fotografía de moda en la ciudad de Nueva York durante los fines de semana. Dedicaba las noches a trabajar en editoriales de moda y bodas a la vez. Adler también empezó a desarrollar una segunda carrera como educadora.
"Mi interés en la enseñanza es poder ayudar a la gente a no tener que dedicar tanto tiempo, esfuerzo y sufrimiento como yo, independientemente de su objetivo" afirma. "Quiero ayudar a la gente a aprender algo de forma rápida y eficiente para que puedan dedicarse a lo que aman, que es la fotografía."
La primera clase de Adler fue "Organización en la era digital". Fue el primero de muchos cursos que impartiría sobre la gestión de recursos digitales. En esta clase enseña a simplificar todo y establecer formas más eficientes de controlar las imágenes y protegerlas con el archivado y varias copias de seguridad. Hoy en día, ofrece clases en todas las grandes conferencias de fotografía de EE. UU. Ha ampliado los temas para abarcar la creatividad y cómo desarrollar técnicas para innovar y ser diferente. Según Adler, el mayor riesgo es la autocomplacencia. La gente nunca debería ser complaciente con su porfolio, ni con su almacenamiento.
Mi mejor copia de seguridad
"Cuando me mudé a Nueva York, dirigía varios proyectos", comenta Adler. "Necesitábamos mucho almacenamiento porque mi director de fotografía usaba Red Cameras y Phantom. Hablé con varios cinematógrafos y directores de fotografía de alto nivel y, cuando comenté que no sabía qué discos duros eran los mejores, sin dudar, muchos me dijeron que confiase en SanDisk Professional. SanDisk Professional no me ha dado ningún problema desde que compré mi primer disco."
La calidad del producto y la fiabilidad son las principales prioridades de Adler para su equipo de almacenamiento. También hace hincapié en la capacidad. Si bien normalmente se aconseja que pienses antes de hacer una foto, Adler tiende a hacer muchísimas. Afirma que las mejoras tomas suelen darse en esos momentos intermedios, cuando el pelo de los modelos está en movimiento o hay una expresión natural fugaz entre poses.
Eso implica muchos gigabytes de imágenes RAW. Desde hace años, Adler usa productos SanDisk Professional y suele confiar en pares de G-Drive ev RAW para el trabajo de campo. Como norma, siempre compra dos unidades de cualquier disco y se asegura de copiar uno en el otro tan pronto como sea posible. También ha incorporado el G-RAID Shuttle 8 con Thunderbolt™ 3 a su flujo de trabajo para crear copias de seguridad de imágenes en el portátil.
"Me facilita mucho el trabajo porque no tengo que llevarme un sistema aparatoso para hacer una copia de seguridad de los datos", afirma Adler. "Mis asistentes pueden hacer una copia de seguridad de los archivos y, cuando llego a casa y conecto todo, está configurado para duplicarse, por lo que tengo todo listo. Es portátil y simple. Básicamente, me permite eliminar un paso de mi flujo de trabajo anterior."
Adler trabaja siempre con su G-Drive ev RAW, que se duplicará automáticamente a un segundo disco ev. Una vez en casa, hace una copia de seguridad del G-Drive ev RAW en su G-RAID Shuttle con redundancia RAID integrada. Se realiza una copia de seguridad del primer G-RAID Shuttle en un segundo G-RAID Shuttle.
Un sistema de copia de seguridad cuádruple no es complicado. Toda la duplicación se hace de forma automática y se gestiona mediante aplicaciones de copia de seguridad. Para las tomas que seleccionan los clientes o se retocan (quizás el 2 % del total de imágenes) también se crea una copia de seguridad en la nube en photoshelter.com.
Limpio, atrevido y gráfico
Si el método de Lindsay Adler parece un poco extremo, ten en cuenta que practica lo que predica. Las copias de seguridad frecuentes han formado parte de su flujo de trabajo desde que era una adolescente. Es una de las pocas profesionales de la fotografía "afortunadas", ya que nunca ha perdido una sola imagen de trabajo. Incluso si se daña o pierde un disco, siempre tiene copias de seguridad preparadas.
Sus prácticas de almacenamiento son coherentes con su elección de marca y su estilo profesional. Sus trabajos se centran en un único elemento, un concepto atractivo. Ese elemento cobra vida en la imagen sin fondos molestos o texturas innecesarias.
"Me gusta describir mi estilo como limpio, atrevido y gráfico."
Desde un punto de vista estético, a Adler también le encanta el diseño de las unidades SanDisk Professional y cómo se apilan para mantener la simplicidad y elegancia del entorno. Cuando habla con sus estudiantes, no menciona marcas concretas, pero sí recomienda dedicar un poco más de dinero para comprar las soluciones adecuadas.
"Sobre todo cuando se está empezando, lo que buscas es algo que sea más barato", comenta Adler, "pero es como usar una cámara o una correa más barata. Si la correa de la cámara se rompe, se romperá la cámara. Lo mismo pasa con los discos. Si falla el disco, perderás los archivos. La inversión extra merece la pena porque te da más tranquilidad."
Los embajadores de SanDisk Professional son líderes en sus respectivos campos que usan productos SanDisk Professional en el trabajo diario. Reciben una compensación por su participación.
Los discos duros externos SanDisk Professional son una parte de una estrategia general de copia de seguridad. Se recomienda a los usuarios conservar dos o más copias de seguridad de sus archivos más importantes en dispositivos separados o distintos servicios en línea.